¡Hola!
Después de semanas “cerrados por reforma”, por fin vuelvo hoy a la cocina con estas deliciosas mini tartaletas rellenas de crema pastelera y fresas frescas.
La receta es del libro Bake with Anna Olson. Me encanta ver sus programas de cocina y sus libros son, ademas de bonitos, muy prácticos.
El resultado, espectacular. Ligeras, con el dulzor justo para no ser empalagosas y un toque salado que equilibra y aporta armonía al postre. Y lo mejor de todo es que son muy muy fáciles de hacer y no se tarda nada en tenerlas listas.
Ingredientes
Crema pastelera
- 1 taza de leche
- 1/2 vaina de vainilla o 1 1/2 cucharadita de pasta de vainilla
- 3 yemas de huevo
- 3 cucharadas de azúcar
- 2 cucharadas de almidón de maíz
- 2 cucharadas (30 g) de mantequilla sin sal cortada en trozos
Base
- 1 taza de harina
- 1 taza de migas de galletas digestive
- 4 cucharaditas de azúcar
- 1/4 cucharadita de sal
- 1/2 taza (115 g) de mantequilla sin sal, derretida
- fresas frescas
Para hacer la crema, calentamos la leche con la vainilla sobre fuego medio sin que llegue a hervir.
En un bol mezclamos las yemas, azúcar y maizena.
En otro bol, metemos la mantequilla y colocamos sobre ella un colador.
Cuando la leche esté caliente, la añadimos gradualmente y sin dejar de batir, sobre la mezcla de las yemas. Luego lo llevamos nuevamente al fuego y removemos hasta que espese, unos dos minutos aproximadamente.
Inmediatamente volcamos esta mezcla sobre el colador que teníamos preparado sobre la mantequilla y lo hacemos pasar ayudándonos con una cuchara si hace falta. Mezclamos bien hasta que se incorpore la mantequilla y luego tapamos con un film colocándolo en contacto directo con la crema para que no se forme costra.
Lo dejamos refrescar a temperatura ambiente y luego lo llevamos a la nevera hasta que vayamos a necesitarlo. Esta crema se puede hacer perfectamente la víspera y tenerla en la nevera.
Para hacer las bases, precalentamos el horno a 180 ºC y engrasamos una o dos bandejas para muffins.
Mezclamos harina, migas de galleta, azúcar y sal en un bol y luego añadimos la mantequilla derretida, mezclando hasta que se incorpore por completo.
Colocamos aproximadamente una cucharada de mezcla en cada molde y lo aplanamos con los dedos, subiéndolo un poco hacia los lados.
Horneamos 10 minutos y dejamos enfriar bien antes de desmoldar.
Para montar el postre, sacamos la crema pastelera de la nevera y la removemos un poco para que vuelva a estar cremosa. Podemos usar una manga o una bolsa de congelación para rellenar las bases más fácilmente, pero si no tenemos nada de esto, podemos usar una cuchara.
Una vez rellenas, colocamos sobre cada tartaleta un trozo de fresa fresca y ya tenemos nuestro postre listo. Antes de comer, aconsejo llevarlas a la nevera durante un par de horas para que la base, que tiende a ser un poco quebradiza, se asiente.
¡Que aproveche!
Bienvenido de nuevo – ¡qué ricas! 🙂
Muchas gracias MD! 🙂